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INFORMACIÓN SOBRE LOS RIESGOS DE INCENDIO DE LOS NEUMÁTICOS

Esta información detalla los principales riesgos de incendio asociados a los neumáticos, así como las medidas generales de prevención que deben aplicarse durante las fases de utilización y almacenamiento. 
Concierne a los principales tipos de neumáticos: turismo, de furgoneta, de camión, moto, agrícola, avión, movimiento de tierra o minería, de competición y metro, así como todos los neumáticos con la tecnología Michelin Acoustic. 
Cabe señalar que las medidas generales establecidas en esta información pueden completarse con recomendaciones específicas disponibles en las documentaciones técnicas para tener en cuenta las particularidades de uso de las distintas gamas de neumáticos (por ejemplo: para neumáticos de minería).

Peligros de incendio

  • En condiciones normales de uso y almacenamiento, los neumáticos no presentan ningún peligro particular.
  • Los neumáticos no se inflaman fácilmente. Se requiere una fuerte fuente de ignición para iniciar la reacción de combustión (véanse los parámetros de inflamabilidad en el apéndice abajo).
  • Los neumáticos arden liberando calor intenso y densos humos negros que contienen productos principales como óxidos de carbono, hidrocarburos, óxidos de nitrógeno, ácidos halogenados y grandes cantidades de hollín y material sin quemar. En algunos casos, los neumáticos arden liberando líquidos aceitosos.
  • La composición del humo del incendio es muy variable dependiendo de la aportación de oxígeno durante el incendio (incendio al aire libre o en espacio confinado, con ventilación insuficiente o excesiva) o de las condiciones meteorológicas (viento, niebla, lluvia, temperatura exterior, ...).
  • La cantidad de humo producida por los neumáticos puede comprometer rápidamente la visibilidad y, por tanto, la evacuación. En espacios confinados (como túneles de metro, andenes y estaciones de metro, por ejemplo), también pueden comprometer la viabilidad de la atmósfera.
  • La tecnología Michelin Acoustic está constituida por una banda de espuma de poliuretano pegada en el interior del neumático para reducir la propagación del ruido de rodadura en el habitáculo del vehículo.  Esta espuma tiene un comportamiento particular frente al fuego. Un neumático con la tecnología Michelin Acoustic puede arder más rápidamente que un neumático estándar y liberar grandes cantidades de humo espeso y tóxico. 

Parámetros de inflamabilidad de un neumático en condiciones de laboratorio:

  • Punto de inflamación: 288 °C
  • Temperatura de autoignición: 315 °C
  • Poder calorífico: entre 24 y 30 MJ/kg en función de la gama y la composición del neumático.

Prevención

  • Los neumáticos deben almacenarse de forma estable, en locales frescos, secos y ventilados, lejos de llamas abiertas y de fuentes de calor.  En particular, no deben realizarse procesos de trabajo en caliente (soldadura, amolado, corte, etc.) en las inmediaciones de los neumáticos sin dispositivos de seguridad adecuados.  Se evitará el contacto directo con superficies calientes (incluidas tuberías de calefacción o radiadores).
  • Será obligatorio prohibir fumar.
  • Los neumáticos deben mantenerse alejados de la mayoría de los productos químicos, incluidos los disolventes, hidrocarburos como la gasolina, el gasóleo, los aceites, las grasas, los ácidos y los desinfectantes.
  • La reacción al fuego de los neumáticos, y de los neumáticos con tecnología Michelin Acoustic en particular (rápida propagación del fuego, liberación de grandes cantidades de humo), hace necesario asegurarse de que se dispone de todos los medios para evacuar al personal de las zonas de almacenamiento.  Se recomienda realizar periódicamente simulacros de evacuación.
  • No se recomienda almacenar los neumáticos en sótanos.
  • Los neumáticos deben utilizarse en las condiciones para las que han sido diseñados. Los trabajos en caliente sobre la rueda de un conjunto inflado pueden provocar accidentes muy graves.  Un aumento de la temperatura provoca un aumento de la presión en el interior del neumático, lo que puede provocar su reventón. Los neumáticos inflados sobre las ruedas deben mantenerse lo más alejados posible de las fuentes de calor.

 

Respuesta de emergencia en caso de incendio

  • Los principales agentes extintores son el agua en grandes cantidades y la espuma.  Al principio de la intervención, se puede utilizar polvo para suprimir las llamas antes de continuar con agua o, eventualmente, espuma.
  • El enfriamiento de un neumático que aún está bajo presión y que se ha calentado debe hacerse a una distancia razonable (de 5 a 10 m como mínimo), para qué en caso de choque térmico y explosión, las personas no puedan ser impactadas por fragmentos y por la onda expansiva. Tenga en cuenta que, en caso de incendio de un neumático de minería, deben aplicarse protocolos de seguridad específicos. Consulte el folleto técnico específico.
  • Un neumático calentado por las llamas acumula mucho calor.  Es entonces muy probable que vuelva a encenderse.  Los neumáticos quemados que han sido apagados deben ser vigilados durante varias horas y enfriándolos continuamente. La ausencia de llamas no significa que el fuego esté apagado.
  • Se debe llevar un equipo de respiración autónomo cuando se responda a un incendio de neumáticos.
     

Se debe evitar la exposición al humo de la combustión.

Este documento es una información sobre los peligros de los neumáticos en las condiciones de uso previstas. 
Esta información se basa en los conocimientos disponibles en el momento de su redacción. 

Madrid a 22 de mayo de 2023

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